Y no soy especial, solo me llamo persona.

La mierda que me persigue, poco a poco me pisa los talones y no quiero, no quiero. Hay veces que me he dejado alcanzar por ella, por ese amasijo de barro podrido llamado FANS, pero no, no puedo ser como ellas, como el fenómeno fan. Me gusta la buena música, si señor, la que inspira, como Nirvana, la que hace bailar como Panic at the disco, la que me vuelve loca como Placebo,la que me hace saltar como The Hives, la que hace llorar como Sunrise Avenue, la que me traslada al paraíso como The Rasmus y la que me hace caer al infierno, como HIM. No quiero ser una posesa como las fans de Bieber, no pienso llamar a las novias de los cantantes PUTAS, me niego. Tengo más vida que toda es música, aunque sin esa música no pueda vivir.